"Puedes engañar a todo el mundo algún tiempo. Puedes engañar a algunos todo el tiempo. Pero no puedes engañar a todo el mundo todo el tiempo.".- Abraham Lincoln (1808-1865) Político estadounidense.
Rusia (ruso:Россия, romanización: Rossíya) o la Federación Rusa (formalmente: Federación de Rusia; ruso: Российская Федерация) es el país más extenso del mundo. Cuenta con una superficie de 17.075.400 kilómetros cuadrados, más de la novena parte de la tierra firme del planeta, con una gran variedad de entornos naturales y relieves.
Esta república semipresidencialista, formada por 83 entes federales, es el noveno país por población al tener 142.000.000 de habitantes. Ocupa todo el norte de Asia y alrededor del 40% de Europa (principalmente Europa Oriental), siendo un país transcontinental. En Rusia hay 9 zonas horarias, desde UTC+2 hasta UTC+11, sin incluir UTC+4. Rusia tiene las mayores reservas de recursos minerales y energéticos del mundo todavía sin explotar, y es considerada la mayor superpotencia energética. Posee las mayores reservas de recursos forestales y la cuarta parte de agua dulce no congelada del mundo.
La historia del país comenzó con los eslavos orientales. Los eslavos emergieron como un grupo reconocible en Europa entre los siglos III y VIII d. C. Fundado y dirigido por una clase noble vikinga guerrera y sus descendientes, el primer estado de los eslavos orientales, la Rus de Kiev, surgió en el siglo IX y adoptó el cristianismo procedente del Imperio bizantino en 988, comenzando una síntesis de las culturas bizantina y eslava que definiría la cultura rusa durante el siguiente milenio. Posteriormente la Rus de Kiev se desintegró en muchos pequeños estados feudales, de los cuales el más poderoso era el Principado de Moscú que se convirtió en la fuerza principal en el proceso de la reunificación rusa y la lucha por la independencia contra la Horda de Oro. Gradualmente Moscú reunificó los principados rusos circundantes y comenzó a dominar en el legado cultural y político de la Rus de Kiev. Para el siglo XVIII la nación se expandió mediante la conquista, anexión y exploración hasta convertirse en el Imperio ruso, el tercer imperio más grande de la historia al extenderse desde Polonia en el oeste, hasta el océano Pacífico y Alaska.
Rusia estableció un poder e influencia mundial desde los tiempos del Imperio ruso hasta ser el mayor y dominante país constituyente de la Unión Soviética (URSS), el primer y más grande Estado socialista constituido constitucionalmente y una superpotencia reconocida. El país puede presumir de una larga tradición de excelencia en todos los aspectos de las artes y las ciencias. La Federación Rusa se fundó al disolverse la Unión Soviética en 1991, pero es reconocida como la heredera de la personalidad legal de la Unión Soviética. Su economía tiene uno de los mayores crecimientos del mundo. Es el octavo país por PIB nominal o el sexto por PIB PPA, con el quinto presupuesto militar más grande del mundo. Es uno de los cinco países con armas nucleares reconocidos y posee el mayor arsenal de armas de destrucción masiva del mundo. Rusia es miembro permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, miembro del G8, APEC y OCS, con gran influencia en el espacio postsoviético, particularmente en la Comunidad de Estados Independientes (CEI).
Etimología
El nombre de Rusia en ruso es «Rossía» (Россия), que procede del griego «Ρωσία» (AFI: [rosˈia]), que es cómo denominaban a la Rus (Русь) en el Imperio bizantino.
Antes del siglo I, las vastas tierras de Rusia meridional fueron pobladas por varias tribus, muy dispersas por el inmenso territorio, como los proto-indoeuropeos y escitas. Entre el siglo III y siglo VI las estepas fueron asoladas por oleadas sucesivas de invasiones nómadas, dirigidas por tribus belicosas que a menudo continuarían su avance hasta Europa, como fue el caso de los hunos y ávaros.
Ivan el Terrible |
Los turcos y los kazajos reinaron las estepas más bajas de la cuenca del Volga entre los mares Caspio y Negro hacia el siglo VIII. Destacaron por sus notorias leyes de tolerancia cosmopolita. Los jázaros fueron la conexión comercial principal entre el Báltico y el imperio musulmán Abbasí radicados en Bagdad. Se convirtieron en importantes aliados del Imperio bizantino y emprendieron una serie de guerras exitosas contra los Califatos árabes.
En esta era, el término "Rhos" o "Rus" fue primero aplicado a los varegos y luego también a los eslavos que habitaban la región. En el período del siglo X a XI la Rus de Kiev o Rusia medieval llegó a ser el principado más grande en Europa y uno de los más prósperos, debido al comercio diversificado tanto con Europa como con Asia. La apertura de nuevas rutas del comercio con Oriente en el tiempo de Las Cruzadas contribuyó a la decadencia y a la fragmentación del principado a fines del siglo XII.
Pedro el Grande |
Al igual que en los Balcanes, el movimiento nómada retardó el desarrollo económico y social del país. Sin embargo, la República de Nóvgorod junto con la ciudad de Pskov retuvieron algún grado de autonomía durante el tiempo de la yunta mongola y pudieron en gran parte evitar las atrocidades que afectaron al resto del país. En el año 1240, la República de Nóvgorod, dirigida por Alexánder Nevsky (1220 – 1263), repelió los intentos de los cruzados germánicos de colonizar la región.
Principado de Moscú
A diferencia de su líder espiritual, el Imperio bizantino, Rusia, bajo el liderazgo de Moscú, pudo revivir y organizar su propia guerra de la reconquista, subyugando finalmente a sus enemigos y anexando sus territorios perdidos. Después de la caída de Constantinopla en 1453, la Rusia moscovita queda como el único estado cristiano funcional en la frontera de Europa Oriental, adquiriendo así el derecho de reclamar la sucesión al legado del Imperio romano de Oriente. Todavía bajo el dominio de los mongolo-tártaros, el ducado de Moscú comenzó a afirmar su influencia en Rusia Occidental en el principio del siglo XIV. El resurgimiento espiritual, apoyado por la Iglesia Ortodoxa y San Sergio de Rádonezh, ayudó al ducado de Moscú a derrotar a los mongolo-tártaros en la Batalla de Kulikovo en 1380.
Ivan IV "El Terrible" (1530 – 1584) pone fin al control de los invasores, consolidando regiones cercanas bajo el dominio de Moscú. Es el primero en tomar el título de "Gran Duque de Todas las Rusias".
Al principio del siglo XVI, el Estado ruso tomó como metas principales recuperar todos los territorios perdidos a consecuencia de la invasión mongolo-tártara y proteger la zona fronteriza meridional contra los ataques de los tártaros de Crimea (Las Guerras Ruso-De Crimea) y de algunos pueblos turcos. Los hidalgos, recibiendo un señorío del soberano, fueron obligados a servir en el ejército. El sistema del señorío llegó a ser la base para la caballería noble. En 1547, Ivan IV fue coronado oficialmente como el primer Zar de Rusia. Durante su reinado, Ivan IV anexionó regiones de Kazán y Astracán entre otras y transformó Rusia en un estado multiétnico. Iván IV promulgó un nuevo código de leyes (Sudebnik de 1550), estableciendo el primer cuerpo representativo feudal (Zemsky Sobor) e introdujo la autogestión local en las regiones rurales. A finales del siglo, cosacos rusos fundaron los primeros establecimientos en Siberia Occidental. Su reinado también fue marcado por la larga y fracasada guerra contra la coalición de Polonia, Lituania y Suecia para el acceso al comercio a través del mar Báltico.
Iván llevó a cabo una serie de purgas en la aristocracia feudal, probablemente provocadas por la traición por parte de príncipe Kurbsky, por las cuales entró en la historia como "El Terrible". Después de su muerte los fracasos militares, las epidemias y las pobres cosechas debilitaron el Estado, los tártaros de Crimea queman la ciudad de Moscú. La muerte de los hijos de Iván combinado con el hambre de 1601-1603 lleva a la guerra civil y a la intervención extranjera.
A mediados del siglo XVII había establecimientos rusos en Siberia Oriental y en la península de Chukchi a través del río Amur. En 1648 el navegante ruso Semión Dezhniov descubre el estrecho que separa Siberia de Alaska. Más tarde, en 1728 será explorado por el navegante danés Vitus Bering, y llevará su nombre (estrecho de Bering).
Imperio ruso
Imperio ruso
El control moscovita de la nación naciente continuó después de la intervención polaca bajo la dinastía subsiguiente de Romanov, empezando con el Zar Miguel I de Rusia en 1613. Pedro I el Grande, quien gobernó el Zarato Ruso, derrotó al Imperio sueco durante la Gran Guerra del Norte, forzándolo a ceder Karelia Occidental e Ingria (dos regiones perdidas por Rusia en el Tiempo de Dificultades), y de Livonia (actuales Estonia meridional y Letonia septentrional). Esto aseguró el acceso del Imperio ruso al mar y el comercio marítimo, en Ingria. Fundó en 1703 una nueva capital, San Petersburgo y fue, en gran parte, responsable de llevar la cultura de Europa Occidental a Rusia, a raíz de sus reformas.
Luego de dichas reformas, Rusia obtuvo poder en Europa. Catalina la Grande, que gobernó entre 1762 a 1796, continuó los esfuerzos de Pedro I ubicando a Rusia como uno de los grandes poderes europeos. Como ejemplos de la participación europea en el siglo XVIII, se destacan la Guerra de Sucesión Polaca y la Guerra de los Siete Años. Tras la división de Polonia, Rusia adquirió los significativos territorios del oeste, los cuales se encontraban poblados principalmente por personas de religión ortodoxa. A consecuencia de las guerras contra el Imperio otomano, Rusia aumentó sus fronteras hasta el mar Negro teniendo como objetivo la protección de la región cristiana de los Balcanes contra los turcos. En 1783, Rusia y el Reino Georgiano (que fue devastado casi totalmente por las invasiones persas y por los turcos) firmaron el tratado de Georgievsk según el cual Georgia (Kartl-Kakheti) recibió la protección de Rusia.
Napoleón abandonando Rusia |
El sucesor de Nicolás I de Rusia, Alejandro II (1855–1881) fue forzado a emprender una serie de reformas completas y publicó un decreto aboliendo la servidumbre, en 1861. Las grandes reformas del reinado de Alejandro II dirigieron cada vez más rápido el desarrollo y las tentativas del capitalista Sergéi Witte hacia la industrialización. Una atmósfera de eslavofilia estaba en aumento, encabezada por la victoria de Rusia en la Guerra Ruso-Turca, la cual forzó al Imperio Otomano a reconocer la independencia de Rumanía, de Serbia y Montenegro, y la autonomía de Bulgaria.
El fracaso de las reformas y la supresión de lo agrario a consecuencia del crecimiento de la intelectualidad liberal, fomentó la continuidad de los problemas. En la víspera de Primera Guerra Mundial, la posición del Zar Nicolás II y su dinastía pareció precaria.
El gobierno ruso no quiso participar en la Primera Guerra Mundial, pero sentía que la única alternativa era la aceptación de la dominación alemana de Europa. Rusos de clase alta y burgueses ayudaron en el esfuerzo de guerra del régimen. Campesinos y trabajadores, en cambio participaron con mucho menos entusiasmo ante la situación. Alemania tenía un ejército que llevaba la delantera en Europa y un enorme poder industrial, teniendo además a Austria y el Imperio Otomano como sus aliados en la guerra. Consecuentemente, Rusia fue forzada a luchar en otras tres guerras y en la guerra inglesa simultáneamente. Bajo estas circunstancias el esfuerzo ruso en la guerra fue impresionante. Habiendo ganado varias grandes batallas en 1916, el ejército guardó distancia cuando estalló la Revolución rusa de 1917, en parte por razones económicas, pero principalmente porque la desconfianza pública ya existente hacia el régimen se profundizó por la corrupción y la traición. Muchas historias fueron inventadas o enormemente exageradas, tal como la creencia que un místico, Grigori Rasputín, tuvo gran influencia política dentro del gobierno. Lo que importó, sin embargo, fue que se creyeron los rumores.
Después de que un poder bolchevique asumió en julio de 1917, su líder, Vladímir Ilich Lenin (nacido Vladímir Ilich Uliánov), huyó a Finlandia por seguridad. Allí escribió "El Estado y la Revolución", llamando a una nueva forma de gobierno basado en consejos de los trabajadores o soviets, e instituyendo al poder soviético elegido, como revocable en todo momento por los trabajadores. Él volvió a Petrogrado en octubre, inspirando la Revolución de octubre con el lema "¡Todo el poder para los soviets!". Lenin dirigió el derrocamiento del Gobierno Provisional del Instituto de Smolny, desde el 6 al 8 de noviembre de 1917. Al final de la Revolución rusa de 1917, una facción política marxista llamó a los bolcheviques a tomar el poder en Petrogrado y Moscú bajo el liderazgo de Lenin. Los bolcheviques cambiaron su nombre a Partido Comunista. El asalto y la capitulación del Palacio de Invierno en la noche del 7 al 8 de noviembre marcaron el principio del gobierno soviético.
El Zar Nicolás II y familia real fueron asesinados y con ello terminó la última dinastía rusa. Durante un tiempo se creyó en el rumor de que la hija menor de la familia, la princesa Anastasia, había sobrevivido, cosa que nunca llegó a confirmarse e investigaciones recientes han terminado por abogar por el contrario.
Revolución de 1917 y el fin de era zarista Mitin de Lenin |
El poder de los soviéticos y la influencia de la revolución de 1905 se fue diluyendo en los años siguientes; sin embargo, con la entrada de Rusia a la I Guerra Mundial, las condiciones de vida de gran parte de la población empeoraron drásticamente, generando las condiciones para nuevas revueltas que darían origen a la Revolución de febrero de 1917, en donde social-revolucionarios, mencheviques, cadetes y bolcheviques intentaron dar -por separado-con nuevas fórmulas de gobierno para Rusia, dando lugar a una breve República de inspiración occidental cuyo máximo líder fue Alexander Kerensky. Este nuevo orden no prosperó debido, principalmente, a la oposición de los líderes rusos de la nueva república a la salida de Rusia de la guerra, lo que favoreció a los bolcheviques que, pese a ser una minoría política entre los partidos de la época, eran los únicos que defendían la salida de la guerra de manera intransigente; de esta manera se dio origen a la revolución de octubre de 1917, de inspiración bolchevique, y a la posterior toma del poder por parte de los soviets liderados por Lenin y Trotsky, quienes crean el Partido Comunista donde fueron dados los primeros pasos para la formación de la URSS.
Después de la victoria de los bolcheviques, Rusia sufre una Guerra Civil (1918-1922) entre los partidarios de la revolución bolchevique (Ejército Rojo) y sus opositores (Ejército Blanco), estos últimos, apoyados en algunos momentos de la guerra, por diversas potencias extranjeras. Para ganar, Lenin adopta el "Comunismo de Guerra", confiscando la producción agrícola para abastecer a los soldados. Con la victoria del Ejército Rojo grandes compañías privadas fueron cerradas como, por ejemplo, la empresa Smirnoff.
Era soviética
La Unión Soviética es la sucesora del Imperio ruso. El último zar, Nicolás II, gobernó hasta marzo de 1917 y fue ejecutado con su familia el año siguiente, en Yekaterimburgo. La Unión Soviética fue establecida en diciembre de 1922 como la Unión de las Repúblicas Soviéticas de Rusia (familiarmente conocida como Rusia Bolchevique), Ucrania, Bielorrusia y Transcaucasia gobernadas, las tres primeras, por partidos bolcheviques y la última por el menchevique.
Revolución y la fundación del estado soviético
La actividad revolucionaria moderna en el Imperio ruso comenzó con la Rebelión Decembrista de 1825, y aunque la servidumbre fue abolida en 1861, lo fue en términos desfavorables para los campesinos y sirvió para animar a los revolucionarios. Un parlamento, la Duma estatal, fue establecido en 1906, después de la Revolución de 1905, pero el malestar político y social siguió. Siendo agravado durante la Primera Guerra Mundial por el fracaso militar y la escasez de alimento en las ciudades principales.
El levantamiento popular espontáneo en Petrogrado, en respuesta al decaimiento de la economía y la moral en tiempo de guerra, culminó con el derrocamiento del gobierno imperial en marzo de 1917. La autocracia zarista fue reemplazada por el Gobierno Provisional Ruso, cuyos líderes pensaron en establecer una democracia liberal en Rusia y continuar participando en el lado de la Triple Entente en la Primera Guerra Mundial. Al mismo tiempo, para asegurar los derechos de la clase obrera, las asambleas de trabajadores, conocidas como Soviets, nacen a lo largo de todo el país. Los bolcheviques, dirigidos por Lenin, presionaron a favor de una revolución socialista tanto en dichas asambleas como en las calles, tomando el poder en el Gobierno Provisional en noviembre de 1917. Sólo tras la larga y sangrienta Guerra civil rusa de 1918–1921, durante la que se aprobó la primera Constitución soviética de 1918 y que incluyó intervención extranjera en varias regiones de Rusia se afianzó el nuevo poder soviético. Tras la Guerra Polaco-Soviética de 1919-1921, la "Paz de Riga" a principios del año 1921 dividió los territorios disputados de Bielorrusia y Ucrania entre Polonia y la RSFS de Rusia.
Unificación de las repúblicas soviéticas
El 29 de diciembre de 1922 una conferencia de delegaciones plenipotenciarias de la RSFS de Rusia, RFSS de Transcaucasia, la RSS de Ucrania y la RSS de Bielorrusia aprobaron el Tratado de Creación de la URSS y la Declaración de la Creación de la URSS, formándose la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas. Estos dos documentos fueron confirmados por el primer Congreso soviético de la URSS y firmados por los cabezas de las delegaciones Mijaíl Kalinin, Mikha Tskhakaya, Mijaíl Frunze, Grigory Petrovsky y Aleksandr Chervyakov respectivamente el 30 de diciembre de 1922. El 1 de febrero de 1924 la URSS fue reconocida por la primera potencia mundial de la época, el Imperio británico.
La re-estructuración intensiva de la economía, la industria y la política del país empezaron desde los primeros días del poder soviético en 1917. Una gran parte se realizó según los Decretos Iniciales Bolcheviques, documentos del gobierno soviético, firmados por Vladimir Lenin. Uno de los adelantos más prominentes era el plan GOELRO, que propugnaba una re-estructuración profunda de la economía soviética basada en la electrificación total del país. El Plan se inició en 1920, desarrollándose durante un período de 10 a 15 años. Incluyó la construcción de una red de 30 centrales eléctricas regionales, incluyendo diez grandes centrales hidroeléctricas, y la electrificación de numerosas empresas industriales. El Plan llegó a ser el prototipo para el subsiguiente Plan Quinquenal finalizándose prácticamente en 1931.
La Era de Stalin
La Era de Stalin
Después de la dura política económica llevada a cabo por los bolcheviques durante la Guerra Civil, el gobierno soviético permitió que algunas empresas privadas coexistieran con la industria nacionalizada durante los años 1920. Del mismo modo, el requisamiento total de los excedentes alimentarios en el campo fue reemplazado por impuestos sobre los alimentos. Aunque algunas de estas medidas fueron discutidas por líderes soviéticos, se consideró necesario para evitar que la explotación capitalista volviera a la Unión Soviética. Los asuntos económicos constituyeron el telón de fondo en la lucha por el poder que se desencadenó entre los líderes soviéticos tras la muerte de Lenin en 1924. Consolidando gradualmente su influencia y aislando a sus rivales dentro del partido Iósif Stalin se convirtió en el líder de la Unión Soviética a mediados de los años 1920.
En 1928, Stalin introdujo el Primer Plan Quinquenal destinado a construir una economía socialista. Esto, a diferencia del internacionalismo expresado por Lenin y Trotsky a través del curso de la Revolución, apuntó al socialismo en el país. En la industria, el estado asumió el control de todas las empresas existentes y emprendió un programa intensivo de industrialización; en la agricultura granjas colectivas fueron establecidas por todas partes en el país. Encontró la resistencia esparcida de campesinos ricos que retuvieron grano, teniendo como resultado una lucha amarga contra las autoridades y el hambre, causando millones de muertes. El trastorno social continuó en los años treinta. La Gran Purga de Stalin del partido eliminó a muchos "Viejos bolcheviques", que habían tomado parte en la Revolución con Lenin. Mientras tanto, innumerables ciudadanos soviéticos fueron encarcelados y enviados a GULAG (Administración Principal para Campamentos de Trabajo Correctivos), una red enorme de campamentos de trabajo forzados, o simplemente ejecutados. Aún a pesar de la confusión a mediados de los años 1930, la Unión Soviética desarrolló una economía industrial poderosa años antes de la Segunda Guerra Mundial.
Jruschov |
Conferencia de Yalta |
La Unión Soviética después de Stalin
Iósif Stalin muere el 5 de marzo de 1953. En ausencia de un sucesor aceptable, los funcionarios más altos del Partido comunista optaron por gobernar la Unión Soviética colectivamente, aunque existiera una lucha por el poder tras de la fachada del liderazgo colectivo. Nikita Jrushchov, que había ganado la lucha por el poder a principios de la década de los años 1950, denunció el uso por parte de Stalin de la represión en 1956 y los controles represivos aliviados sobre el partido y la sociedad conocidos como desestalinización. Al mismo tiempo, la fuerza militar soviética fue utilizada para suprimir los levantamientos nacionalistas en Hungría y Polonia en 1956. Durante este período, la Unión Soviética continuó dándose cuenta del extenso potencial científico y tecnológico y lo explota, lanzando el primer satélite artificial Sputnik 1, el primer ser vivo en viajar al espacio es Laika, y más tarde, el primer ser humano que está Yuri Gagarin en la órbita de la Tierra. Valentina Tereshkova fue la primera mujer en volar al espacio a bordo de Vostok 6 el 16 de junio de 1963, y Alexei Leonov llegó a ser la primera persona en andar en el espacio el 18 de marzo de 1965. Las reformas de Jrushchov en la agricultura y la administración fueron generalmente improductivas y la política exterior hacia China y Estados Unidos sufrió deterioros, estas circunstancias llevaron a la Ruptura Chino-Soviética. Jrushchov fue jubilado del poder en 1964.
Después de la expulsión de Jrushchov, siguió otro período de la regla por el mando colectivo, que duró hasta que Leonid Brézhnev se estableciera a principios de los años 1970 como la figura preeminente en la vida política soviética. Brezhnev presidió por el período de Détente con el Oeste al mismo tiempo aumentando la fuerza militar soviética; la concentración de armas contribuyó a la desaparición del Détente a finales de los años 1970. A través del período, la Unión Soviética mantuvo la igualdad con Estados Unidos en las áreas de la tecnología militar, pero esta expansión finalmente hizo que se paralizara la economía. Por contraste al espíritu revolucionario que acompañó el nacimiento de la Unión Soviética, el criterio predominante del liderazgo soviético en el tiempo de la muerte de Brezhnev en 1982 fue uno de aversión de cambiar.
Las reformas de Gorbachov y la disolución
Brezhnev |
Dos fenómenos caracterizaron la siguiente década: el desmoronamiento cada vez más evidente de las estructuras económicas y políticas de la Unión Soviética, y las tentativas de un conjunto fragmentario de reformas para invertir ese proceso. Después de la sucesión rápida de Yuri Andrópov y Konstantín Chernenko, figuras de transición con raíces profundas en la tradición Brezhnevita, Mijaíl Gorbachov fue designado líder de la URSS. Gorbachov comenzó a aplicar cambios significativos en la economía y el liderazgo del partido. La política de Glásnost liberó el acceso público a la información después de décadas de pesada censura del gobierno, como también abogó por la transparencia en la gestión de los líderes soviéticos.
A finales de los años 1980, las repúblicas que componían de la Unión Soviética comenzaron legalmente un movimiento hacia una declaración de soberanía sobre sus territorios, citando el Artículo 72 de la Constitución de la URSS, que indicaba que cualquier república componente era libre de separarse. El 7 de abril de 1990 fue aprobada una ley, por la cual una república podría separarse, si más de dos terceras partes de los residentes de la república votaban a favor de ello en un referéndum. Muchas liberalizaron primero las elecciones de la era soviética para sus propias legislaturas nacionales en 1990. Éstas avanzaron en una legislación que contradecía las leyes de la Unión en lo que fue conocida como "La Guerra de Leyes". En 1989, la RSFS de Rusia, que era entonces la república más grande (con cerca de la mitad de la población) convocó una nueva elección para un Congreso de Diputados del Pueblo. Borís Yeltsin fue elegido presidente del Congreso. El 12 de junio de 1990, el Congreso declaró la soberanía de Rusia sobre su territorio y se adelantó a hacer leyes que procuraban desbancar algunas de las normas de la URSS. El período de la incertidumbre legal continuó a través de 1991 cuando las repúblicas componentes llegaron a ser lentamente independientes en la práctica.
Plaza Roja de Moscú |
El 8 de diciembre de 1991, los presidentes de Rusia, Ucrania y Bielorrusia firmaron el Tratado de Belovesh que declaró la Unión Soviética disuelta y se estableció la Comunidad de Estados Independientes (CEI), en su lugar. Como quedaban dudas sobre la autoridad del Tratado de Belovesh para disolver la Unión, el 21 de diciembre de 1991, los representantes de todas las repúblicas soviéticas excepto Georgia, inclusive las repúblicas que habían firmado el Tratado de Belovesh, firmaron el Protocolo de Alma-Ata, que confirmó el desmembramiento y la extinción consecuente de la URSS y volvió a plantear el establecimiento de la CEI. La cumbre de Alma-Ata convino también en varias otras medidas prácticas como consecuencia de la extinción de la Unión Soviética. El 25 de diciembre de 1991, Gorbachov se rindió a lo inevitable y renunció como presidente de la URSS, declarando a la URSS disuelta. Transfirió los poderes, que pasaron desde entonces a Borís Yeltsin, el presidente de Rusia. El día siguiente, el Soviet Supremo de la URSS, el cuerpo gubernamental más alto de la Unión Soviética, reconoció el desplome de la Unión Soviética y se disolvió. Esto es reconocido generalmente como la disolución final de la Unión Soviética como un estado.
La Federación Rusa
A mediados de los años 1990, Rusia era aparentemente una democracia multipartidista, mas era difícil asegurar un gobierno representativo a causa de dos problemas estructurales: el enfrentamiento entre el presidente y el parlamento, y el anárquico sistema de partidos. Aunque Yeltsin ganó prestigio en el extranjero al mostrarse como un demócrata para debilitar a Gorbachov, su concepción de la presidencia era muy autocrática, actuando bien como su propio primer ministro (hasta junio de 1992) o bien nombrando para tal cargo a gente de su confianza, sin tener en cuenta al parlamento.
Mientras, la excesiva presencia de partidos minúsculos y su rechazo a formar alianzas coherentes dejaba la legislatura ingobernable. Durante 1993, el contencioso entre Yeltsin y el parlamento culminaría con la crisis constitucional de octubre. Ésta llegó a su punto crítico cuando, el 3 de octubre, Yeltsin mandó a los tanques a bombardear el parlamento ruso. Con este trascendente (e inconstitucional) paso de disolver a cañonazos el parlamento, Rusia no había estado tan cerca del enfrentamiento civil desde la revolución de 1917. A partir de entonces, Yeltsin dispuso de entera libertad para imponer una constitución con fuertes poderes presidenciales, que fue aprobada en referéndum en diciembre de 1993.
Gorbachov actualmente |
Las reformas económicas consolidaron una oligarquía semicriminal enraizada en el viejo sistema soviético. Aconsejada por los gobiernos occidentales, el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, Rusia se embarcaría en la más grande y más rápida privatización jamás llevada a cabo por un gobierno en toda la historia. A mediados de década, el comercio, los servicios y la pequeña industria ya estaban en manos privadas. Casi todas las grandes empresa fueron adquiridas por sus antiguos directores, engendrando una clase de nuevos ricos cercanos a diversas mafias o a inversores occidentales. En la base del sistema, a causa de la inflación o el desempleo, muchos obreros acabaron en la pobreza, la prostitución o la delincuencia.
A pesar de todo, un supuesto regreso a la economía dirigida parecía casi imposible, contando con el rechazo unánime de Occidente. La economía rusa encontró el fin del calvario con la recuperación a partir de 1999 en parte gracias al alza de los precios del crudo, su principal exportación aun quedando lejos los niveles de producción soviéticos.
Desfile Día de la Victoria |
En las elecciones legislativas rusas de 2007 el partido Rusia Unida (conservador y centrista), que apoya incondicionalmente a Putin y el curso de desarrollo tomado desde su llegada al poder, consiguió el 64,30% de los votos, lo que se consideró como apoyo de los rusos al dicho curso político y económico.
En las elecciones presidenciales de Rusia de 2008, el candidato del partido Rusia Unida, Dmitri Medvédev, apoyado por el entonces presidente Vladímir Putin, ganó por amplio margena sus opositores en las urnas. Medvédev asumió el cargo en mayo de 2008.
Gobierno y política
Según la Constitución, que fue adoptada en referéndum nacional el 12 de diciembre de 1993 después de la crisis constitucional rusa de 1993, Rusia es una federación y una república semipresidencialista, donde el Presidente es el Jefe de Estado y el Presidente del Gobierno (primer ministro) es el Jefe de Gobierno. La Federación Rusa está constituida como una democracia representativa. El poder ejecutivo se ejerce por el gobierno. El poder legislativo es responsabilidad de las dos cámaras de la Asamblea Federal. El gobierno se regula por un sistema de controles y balances definidos por la Constitución de la Federación Rusa, la ley fundamental del país y el contrato social para el pueblo de la Federación Rusa.
El gobierno federal está compuesto por tres ramas:
- Legislativa: La Asamblea Federal bicameral, formada por la Duma Estatal (cámara baja) y el Consejo de la Federación (cámara alta), adopta leyes federales, declara la guerra, aprueba tratados, maneja las finanzas, puede aprobar un impeachment por el que puede destituir al Presidente.
- Ejecutiva: El Presidente es el Comandante en Jefe del ejército, puede vetar los proyectos de ley, designa el Gabinete y a otros funcionarios, quienes administran y hacen cumplir las leyes federales y normas.
- Judicial: La Corte Constitucional, la Corte Suprema, la Corte Suprema de Arbitraje y las cortes federales de menor nivel, cuyos jueces son nombrados por la Asamblea Federal por recomendación del Presidente, interpretan las leyes y pueden abolir leyes si estiman que son inconstitucionales.
Desde 1996, Rusia ha establecido una moratoria sobre la aplicación de la pena capital, aunque ésta no ha sido abolida por ley.
El Presidente se elige por votación popular para un mandato de seis años (desde las modificaciones constitucionales de 2008; actual mandato es de cuatro años) con la opción de ser elegido para un segundo mandato consecutivo (no hay restricción sobre el número total de veces que la misma persona puede ser elegida. El legislativo es la Asamblea Federal consistente de dos cámaras; la Duma Estatal con 450 diputados y el Consejo de la Federación con 178 representantes.
Relaciones exteriores
La Federación Rusa es reconocida en el Derecho internacional como continuidad de la personalidad jurídica de la antigua Unión Soviética. Rusia continúa implementando los compromisos de la URSS, había asumido el asiento permanente de la URSS en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, así como la afiliación en otras organizaciones internacionales, además de los derechos y obligaciones bajo los tratados internacionales, las propiedades y deudas. La política exterior de Rusia es polifacética. Rusia mantiene relaciones diplomáticas con 178 países y tiene 140 embajadas. La política exterior de Rusia la dirige el Presidente y la implementa el Ministerio de Asuntos Exteriores.
La Federación Rusa consiste en un gran número de subdivisiones políticas diferentes, haciendo un total de 83 componentes constituyentes. Hay 21 repúblicas dentro de la federación que disfrutan de un alto grado de autonomía sobre la mayor parte de cuestiones internas y estas corresponden a algunas minorías étnicas de Rusia (aunque no siempre sean mayoritarias en ese territorio). Cada república tiene su propia constitución. El territorio restante consiste en 9 krais (territorios), 46 provincias conocidas como óblasts, 4 distritos autónomos y un óblast autónomo. Aparte de estos hay dos ciudades federales, Moscú y San Petersburgo. Recientemente, se han añadido siete distritos federales extensos como una nueva capa entre las susodichas subdivisiones y el nivel nacional.
La Federación Rusa se extiende a través de la mayor parte del norte del supercontinente Eurasia por lo que existen una gran variedad de paisajes y climas. La mayor parte del paisaje consiste en llanuras enormes, tanto en la parte europea como en la parte asiática que son ampliamente conocidas como Siberia. Estas llanuras son predominantemente estepa al sur y arbolado denso al norte, con la tundra a lo largo de la costa del norte. Se encuentran cadenas montañosas a lo largo de las fronteras del sur, como el Cáucaso (conteniendo el Monte Elbrus, el punto más alto de Rusia con 5.633 m) y el Altái, y en la parte este, como la Cordillera Verjoyansk o los volcanes sobre Kamchatka. Notables son los Montes Urales en la parte central que son la división principal entre Europa y Asia.
Tolstoi |
Muchos grandes ríos fluyen a través de las llanuras desembocando en las costas rusas. En Europa estos son el Volga, Don, Kama, Oka y el Dvina del Norte, mientras otros ríos nacen en Rusia, pero desembocan en otros países, como el Dnieper y el Dvina Occidental. En Asia se encuentran los ríos Ob, Irtysh, Yeniséi, Angara, Lena y Amur. Los lagos principales incluyen el lago Baikal, lago Ladoga y lago Onega.
Economía
La crisis económica que afectó a todos los países post-soviéticos en los años 1990 fue peor que la Gran Depresión en los países de Europa Occidental y los Estados Unidos en los años 1930. Incluso antes de la crisis financiera del año 1998 el PIB de Rusia disminuyó hasta la mitad de los niveles de principios de la década de los 1990. Con el comienzo del nuevo siglo, los crecientes precios del petróleo, mayores inversiones del exterior, mayor consumo interno y mejor estabilidad política reforzaron el crecimiento económico de Rusia. A finales de 2007 el país disfrutaba del noveno año de crecimiento continuo, con una media del 7% desde la crisis financiera del 1998. En el 2007 el PIB de Rusia fue de 2,076 billones de dólares (est. PPA), el sexto más grande del mundo, con el crecimiento de 8,1% desde el año anterior. El crecimiento se debe principalmente a bienes y servicios no transables para el mercado interno, en comparación con la extracción de petróleo y otros minerales y las exportaciones. El salario medio en Rusia fue de unos 640$ al mes a principios de 2008, comparado con 80$ en 2000. Aproximadamente el 14% de los habitantes vivían por debajo de la línea de pobreza en 2007, muchos menos comparado con el 40% del año 1998. El desempleo en 2007 era del 6%, mientras que en 1999 era del 12,4%.
Rusia posee las mayores reservas de gas natural del mundo, las segundas mayores reservas del carbón y las octavas mayores reservas del petróleo. Es el primer exportador del gas natural y el segundo del petróleo, gas natural, metales y madera constituyen el 80% de las exportaciones de Rusia. Sin embargo, desde el 2003, las exportaciones de recursos naturales empezaron a descender en importancia para la economía, al reforzarse considerablemente el mercado. A pesar de los elevados precios, el petróleo y gas sólo contribuyen con el 5,7% al PIB de Rusia, y el gobierno pronostica un 3,7% para el año 2011. Se considera que Rusia está muy por delante de la mayoría de los países ricos en recursos en su desarrollo económico, con una larga tradición en educación, ciencia e industria. El país tiene el mayor número de graduados en educación superior que cualquier otro país europeo.
El desarrollo económico del país es irregular geográficamente, con la región de Moscú contribuyendo con cantidades desproporcionadas al PIB. Gran parte de Rusia, especialmente las comunidades rurales en Siberia se encuentran muy atrás. No obstante, la clase media creció de sólo 8 millones de personas en el 2000 hasta 55 millones en el 2006. En Rusia se encuentra el segundo mayor número de multimillonarios del mundo, después de Estados Unidos, con 50 multimillonarios en 2007 de un total de 110.
La inflación creció hasta el 12% al final de 2007, comparado con el 9% en 2006. Esta tendencia continuó en el primer trimestre del 2008, debido principalmente al aumento de los precios de los alimentos. La infraestructura, obsoleta e inadecuada después de años de descuido, se considera un obstáculo para el crecimiento económico. El gobierno prevé invertir 1 billón de dólares en infraestructura hasta el 2020.
Demografía
Según las estimaciones preliminares al censo de 2010, la población residente de la Federación Rusa el 1 de enero de 2010 era de 142,905 millones de personas. En 2007 la población disminuyó en 237.800 personas, o en 0,17% (en 2006 – en 532.600 personas, o en 0,37%). La inmigración creció un 50,2% en 2007 hasta alcanzar 274.000. La mayoría de los inmigrantes llegaron desde la CEI y eran rusos o rusoparlantes. Además se estima que hay unos 10 millones de inmigrantes ilegales de las antiguas repúblicas soviéticas en Rusia. La Federación Rusa es una sociedad diversa y multi-étnica, hogar para 160 grupos étnicos y pueblos indígenas distintos. Aunque la población de Rusia es relativamente grande, la densidad de población es baja por la enorme extensión del país. La densidad es mayor en la parte europea de Rusia, cerca de los Montes Urales y en el sudoeste de Siberia.
El 73% de la población vive en áreas urbanas. Según el censo de 2002, las dos ciudades más grandes de Rusia son Moscú (10.126.424 habitantes) y San Petersburgo (4.661.219). Otras once ciudades tienen entre uno y dos millones de habitantes: Cheliábinsk, Kazán, Novosibirsk, Nizhni Nóvgorod, Omsk, Perm, Rostov del Don, Samara, Ufá, Volgogrado, y Ekaterimburgo.
Tchaikovsky |
Idioma
Los 160 grupos étnicos de Rusia hablan en unos 100 idiomas. Según el censo de 2002, 142,6 millones de personas hablan en ruso, seguido por el tártaro con 5,3 millones y alemán con 2,9 millones. El ruso es el único idioma oficial a nivel estatal, pero la Constitución concede a las repúblicas de Rusia el derecho a declarar su idioma nativo como cooficial junto al ruso. A pesar de la difusión, el idioma ruso es homogéneo en Rusia. El ruso es uno de los idiomas más difundidos de Eurasia y el idioma eslavo más hablado. El ruso pertenece a la familia de lenguas indoeuropeas y es una de las lenguas vivas del subgrupo de lenguas eslavas orientales, junto con el ucraniano, bielorruso y rusino. Ejemplos escritos del antiguo ruso datan del siglo X en adelante.
Más de un cuarto de la literatura científica del mundo se publica en ruso. El ruso se utiliza para codificar y almacenar el conocimiento universal: entre 60% y 70% de toda la información mundial se publica en inglés y ruso. El idioma ruso tiene una gran importancia regional, particularmente en las Ex Repúblicas Soviéticas. Es uno de los seis idiomas oficiales de la ONU, y uno de los cuatro idiomas de trabajo en la OSCE. El año 2007 fue designado Año Internacional de la Lengua Rusa.
Religión
Según el Centro de Investigaciones Sociológicas de la Universidad Estatal de Lomonosov Moscú, el 43.3% de los adultos se considera adherente de la Iglesia Ortodoxa Rusa, mientras el 50.6% se considera sencillamente cristiano. Aunque los ortodoxos rusos son predominantes, otras comunidades cristianas como los ortodoxos armenios, católicos, protestantes, mormones y testigos de Jehová también existen en cantidades menores. Según una ley de 1997 sobre religión, las cuatro religiones tradicionales de Rusia son la Iglesia Ortodoxa Rusa, el Islam, el Budismo y el Judaísmo. Todas las demás religiones deben cumplir una serie de requisitos para su inscripción y derecho a predicar. Se calcula que existen alrededor de 15 millones de musulmanes rusos, siendo así el Islam la segunda religión con más adherentes en Rusia. El budismo, especialmente de tipo tibetano o lamaísmo es mayoritario en algunas regiones del sur de Rusia, especialmente Buriatia, Kalmukia, Tuvá y Yakutia. En zonas rurales de Siberia y Chukotka se practican cultos paganos y chamanistas de manera sincrética con religiones como
el budismo y el cristianismo. Rusia es el sexto país con mayor cantidad de judíos después de Israel, EE. UU., Canadá, Reino Unido y Francia. También existen comunidades pequeñas de hare krishnas y neopaganos. Se encuentra además un porcentaje muy superior al promedio internacional de ateísmo, en parte consecuencia de la pasada política soviética que, con base en los textos comunistas de Karl Marx, desalentaba la religión.
Ciudades
En el censo de 2002, 329 ciudades de la Federación de Rusia superaban los 50.000 habitantes; 166 tenían más de 100.000 habitantes; 75 más de un cuarto de millón; 34 más de medio millón; y 13 ciudades ya superaban el millón de habitantes.
Los numerosos grupos étnicos de Rusia tienen sus tradiciones características en música folclórica. La música en Rusia del siglo XIX estaba definida por la tensión entre el compositor clásico Mijaíl Glinka y sus seguidores, quienes defendían la identidad nacional rusa y añadieron elementos religiosos y folclóricos a sus composiciones, y la Sociedad Musical Rusa liderada por los compositores Antón y Nikolái Rubinstein, que defendían el punto de vista conservador. La tradición romántica tardía de Chaikovski, uno de los más destacados compositores de la era romántica cuya música sería conocida y querida por su carácter distintivo ruso así como sus ricas armonías y conmovedoras melodías, fue introducida en el siglo XX por Sergéi Rajmáninov.
El compositor ruso Piotr Ilich Chaikovski compuso las más famosas obras de ballet del mundo: El lago de los cisnes, El cascanueces y La bella durmiente del bosque. Durante los principios del siglo XX, los bailarines rusos Anna Pávlova y Vátslav Nizhinski se hicieron famosos, y el empresario Sergéi Diágilev y sus Ballets Rusos viajaron por el extranjero influyendo en el desarrollo de la danza mundialmente. El ballet soviético mantuvo y perfeccionó las tradiciones del siglo XIX, y las escuelas de coreografía de la Unión Soviética produjeron estrellas de fama internacional una detrás de otra, incluyendo a Maia Plisiétskaia, Rudolf Nuréyev, y Mijaíl Baríshnikov. El Teatro Bolshói de Moscú y el Ballet Mariinski de San Petersburgo permanecen famosos en todo el mundo.
Literatura
La literatura rusa se considera una de las más influyentes y desarrolladas del mundo, contribuyendo con muchas de las más conocidas obras literarias. La historia literaria rusa data del siglo X, y de principios del siglo XIX emergió una tradición nativa, desarrollando a los más grandes escritores de todos los tiempos. Este periodo y la Edad de oro de la poesía rusa comenzó con Aleksandr Pushkin, considerado el fundador de la literatura rusa moderna y frecuentemente descrito como el Shakespeare ruso. Entre los más renombrados poetas y escritores rusos del siglo XIX están Evgeny Baratynsky, Mijaíl Lérmontov, León Tolstói, Nikolái Gógol, Iván Turgénev y Fiódor Dostoyevski. Iván Goncharov, Mijaíl Saltykov-Shchedrín, Antón Chéjov, Alekséi Písemski y Nikolái Leskov hicieron aportaciones duraderas a la prosa rusa. Tolstói y Dostoyevski en particular fueron unas figuras titánicas hasta el punto de que muchos críticos literarios caracterizaron a uno o al otro como el mejor novelista que jamás haya existido.
En los años 80 del siglo XIX la literatura rusa empezó a cambiar. La era de los grandes novelistas había acabado y los relatos cortos y poesía empezaron a ser los géneros dominantes para las siguientes décadas conocidas como la Edad de plata de la poesía rusa. Dominada anteriormente por el realismo, la literatura rusa entre 1893 y 1914 estaba dominada por el simbolismo. Los escritores destacados de este período incluyen a Valeri Briúsov, Andréi Bely, Viacheslav Ivanov, Aleksandr Blok, Nikolái Gumiliov, Dmitri Merezhkovski, Fiódor Sologub, Anna Ajmátova, Ósip Mandelshtam, Marina Tsvetáyeva, Leonid Andréyev, Iván Bunin y Máximo Gorki.
Después de la revolución rusa de 1917 y la guerra civil, la vida cultural estaba en caos. Algunos arraigados escritores salieron de Rusia, mientras que estaba emergiendo una nueva generación de escritores con talento quienes simpatizaban con la revolución. Los más entusiastas se unieron en organizaciones con el objetivo de crear una nueva y distintiva cultura proletaria para un nuevo estado. En los años 1920 los escritores disfrutaron de una amplia tolerancia, En los años 1930 la censura se endureció en línea con la política de Stalin del realismo socialista. Después de su muerte hubo un deshielo en las restricciones, que fueron disminuidas. En los 1970 y 80, los escritores cada vez más ignoraban la guía del realismo socialista. Los principales escritores de la era soviética son Yevgeni Zamiatin, Isaak Bábel, Ilf y Petrov, Yuri Olesha, Vladimir Nabokov, Mijaíl Bulgákov, Borís Pasternak, Aleksandr Solzhenitsyn, Vladímir Mayakovski, Sergéi Yesenin, Mijaíl Shólojov, Yevgeni Yevtushenko y Andréi Voznesenski.
Artes visuales
La pintura rusa temprana se centra en iconografía y frescos heredados por los rusos del Bizancio. A medida de que el poder de Moscú aumentaba,y Feofan Grek y Andréi Rubliov son los nombres clave asociados con el comienzo de un arte distintivamente ruso. La Academia Imperial de las Artes fue creada en 1757, con el objetivo de dar un papel y estatus internacional a los artistas rusos. Notables pintores de retratos de la Academia incluye a Ivan Argunov, Fiodor Rokotov, Dmitri Levitski y Vladímir Borovikovski. Realismo floreció en el siglo XIX y los realistas tomaron la identidad rusa. Paisajes rusos de anchos ríos, bosques, y claros entre abedules, así como un género de escenas enérgicas y retratos robustos de sus contemporáneos afirmaron un sentido de identidad. Otros artistas se centraron en la crítica social, mostrando las condiciones de los pobres y caricaturizando la autoridad mientras floreció el realismo crítico bajo el reinado de Alejandro II.
Kremlim a vista de pájaro |
El término vanguardismo ruso engloba una amplia e influyente tendencia del arte moderno que floreció en Rusia desde aproximadamente 1890 hasta 1930. El término cubre muchos distintos, pero inseparablemente ligados, movimientos artísticos del aquél tiempo, como el neoprimitivismo, suprematismo, constructivismo, rayonismo y futurismo ruso. Artistas notables de esta era incluyen a El Lissitzky, Kazimir Malévich, Vasili Kandinski, Vladímir Tatlin, Aleksandr Ródchenko y Marc Chagall entre otros. El vanguardismo ruso alcanzó su auge máximo de creatividad y popularidad en el período entre la revolución del 1917 y el 1932, cuando las ideas vanguardistas chocaron con la recientemente emergida directriz conservativa estalinista del realismo socialista.
A finales de los años 1920 la estricta política del realismo socialista envolvió los artes visuales del mismo modo que la literatura y el cinematógrafo, con lo que pronto el vanguardismo se desvaneció. Algunos artistas como Ernst Neizvestni, Ilia Kabakov, Mijail Shemiakin, Erik Bulatov y Vera Mujina combinaron la innovación con el realismo socialista. Ellos empleaban técnicas tan variadas como el primitivismo, la hiperrealidad, el grotesco y la abstracción, pero compartían un desagrado común por los cánones del realismo socialista. Algunos artistas soviéticos realizaron trabajos muy patrióticos y antifascistas en los años 1940. Los eventos y batallas de la Gran Guerra Patria fueron descritos con un conmovedor patriotismo y después de la guerra los escultores hicieron muchos monumentos dedicados a los muertos de la guerra, de los cuales los más destacados tenían una gran solemnidad contenida. En el siglo XX muchos artistas rusos trabajaban en la Europa occidental, debido en parte a los traumas de la revolución. Artistas rusos como Vasili Kandinski, Marc Chagall y Naum Gabo difundieron su trabajo e ideas internacionalmente. Estos artistas rusos estudiaron en diferentes países, en París y Múnich y su exilio involuntario difundió el impacto del arte ruso globalmente.
(De Wikipedia y otras fuentes)
...
“Los moscovitas quieren un 'Invierno ruso': protagonizan la mayor marcha antigubernamental desde los años 90”
Alrededor de 30.000 personas han protestado en Moscú contra lo que consideran un pucherazo electoral de Vladimir Putin. Lo han hecho ante 50.000 policías. Ya se conoce como 'Invierno ruso' a la mayor manifestación antigubernamental desde los años 90, que busca avances democráticos en este país siguiendo la estela árabe.
Moscú está siendo escenario de la mayor manifestación antigubernamental desde los años 90. En esta ocasión, la población se ha echado a la calle para protestar por los resultados de los comicios parlamentarios celebrados el pasado domingo en Rusia bajo el lema "Por unas elecciones limpias".
Las "urnas" de Putin... |
Los manifestantes de Moscú, convocados por el movimiento Solidaridad, denunciaron el fraude en las elecciones legislativas del domingo pasado y exigieron a las autoridades la celebración de nuevos comicios parlamentarios, la liberación de los presos políticos y la investigación de todas las irregularidades electorales.
Los congregados exigieron también la destitución del presidente de la Comisión Electoral Central (CEC), Vladímir Churov, al que muchos responsabilizan de las graves irregularidades registradas durante la jornada electoral, según las agencias rusas.
En respuesta a los manifestantes, el vicepresidente de la CEC, Stanislav Vavílov, dijo en declaraciones a la agencia Interfax que las acusaciones lanzadas por los manifestantes de Moscú no tienen fundamento. "Ayer se firmó el acta. Las elecciones fueron reconocidas como válidas y no hay motivo para hacer otras valoraciones. No hay motivos para revisar los resultados de los comicios", apuntó Vavílov.
El partido Rusia Unida (RU) de Vladímir Putin y del presidente Dmitri Medvédev, conserva la mayoría absoluta en la Duma (cámara de diputados) con 238 diputados, 12 más de los necesarios para alcanzar la mayoría (226), según los resultados oficiales definitivos de las elecciones anunciados el viernes por la CEC. El partido del Kremlin perdió 77 escaños con respecto a los pasados comicios legislativos, por lo que no tendrá la mayoría constitucional.
No le quieren ni en pintura... |
Los paseos a ambas orillas del río Moscova se inundaron de una marea de gente, al igual que la plaza Bolótnaya, lugar consensuado con las autoridades para la manifestación, y también los accesos a la plaza, las calles aledañas y todos los alrededores.
Los ciudadanos descontentos portaban pancartas con las consignas: "Exigimos el recuento de votos", "Devolvamos las elecciones al país" y "Rusia Unida, admite tu lugar", este último en alusión al abultado y para muchos poco creíble resultado del partido oficialista, liderado por el primer ministro ruso, Vladímir Putin.
En San Petersburgo, la segunda mayor ciudad de Rusia, unas 10.000 personas salieron a la calle para denunciar el fraude en las elecciones, mientras que la policía detuvo a diez personas por desorden público. La gran jornada de protesta ya había empezado cuando la capital rusa apenas entraba en la madrugada del sábado, y cuando la luz del sol asomó a la parte europea de Rusia, en algunas ciudades del Extremo Oriente y Siberia las manifestaciones ya habían concluido.
Dieciséis personas pasaron a disposición policial en la ciudad de Perm, veinte en la localidad siberiana de Nizhnevátorsk, veinte en Bélgorod, diecisiete en Yekaterimburgo, doce en Tula, diez en San Petersburgo y varios en Chitá, Kazán, Samara y Kurgán, mientras que en Moscú no hubo ni un sólo detenido. Alrededor de dos mil personas se congregaron en el centro de la capital de los Urales, Yekaterimburgo, mientras que en otra localidad de este distrito federal, Cheliabinsk, el número de manifestantes llegó a un millar.
Otras mil personas salieron a las calles de Volgogrado (antiguo Stalingrado), mientras que más de 600 se manifestaron en Arjanguelsk, en el Extremo Norte europeo ruso.
A orillas del río Volga, en Samara, cuatro mil personas retaron a las autoridades en un mitin no autorizado por el Ayuntamiento. Hasta tres mil personas ocuparon la plaza central de la ciudad siberiana de Tomsk al son de aplausos y gritos "Elecciones limpias".
También en otra de las urbes más importantes de Siberia, en Novosibirsk, miles de personas salieron sin miedo a los 15 grados bajo cero que hay en las calles de esta ciudad para denunciar, en una protesta autorizada, el fraude electoral. Cientos de personas, en muchos lugares más de medio millar, se congregaron en las plazas y calles más céntricas de Ufá, Tula, Yaroslavl, Kurgán, Krasnodar, Kostromá, Omsk, Nizhni Nóvgorod, Vorónezh, Tver, Petrozavodsk, Tver, Kémerovo, Barnaul, Novokuznetsk y otras muchas ciudades de la extensa geografía rusa.
(Agencia EFE)
…
(“El Imparcial”, 11-12-2011)
“Las manifestaciones que tuvieron lugar ayer por toda Rusia denunciando las irregularidades de las últimas elecciones suponen un hito en la historia del país. Desde el intento de golpe de estado dado por los comunistas contra el entonces presidente Mijaíl Gorbachov en 1991, no se recordaba una movilización callejera semejante. Especial relevancia tuvo la celebrada en Moscú donde, desafiando las múltiples amenazas gubernamentales, miles de personas alzaron su voz contra una manipulación electoral cada vez más evidente.
¿Amado por el pueblo? |
El problema, pues, es el sistema en sí mismo. Bien es verdad que la digestión del comunismo es harto complicada, pero entre la corrupción por un lado y los tics totalitarios del pasado por otro, a la sociedad rusa le cuesta mucho avanzar. Lo ha intentado en estas últimas elecciones, mostrando su descontento en las urnas, pero el “establishment” ruso -casi habría que decir “soviético”- lo ha impedido. Y ya va siendo hora de que en Rusia haya una democracia como es debido.”
…
Como no podía ser menos, en Rusia han vuelto a alzarse las voces disidentes y de protesta, cuando una vez más el “zar” Putin ha vuelto a imponer la “dictadura” de sus decisiones en las urnas, mediante unas elecciones llenas de sospechas de fraude.
No deja de ser sintomático que en los países de la órbita de la ex URSS, la limpieza democrática casi siempre sea dudosa, como en otras naciones de estructuras políticas vacilantes, cual los de centro e ibero América, por no hablar de varios de los asiáticos y africanos.
Así, no hace muchos años que en Ucrania se produjo el “pucherazo” de Yanukóvich, ese antidemócrata pro-oligarquía que hoy es por desgracia el presidente de Ucrania, que dio pie a aquella bonita pero inútil reacción del pueblo ucraniano mediante la llamada “revolución naranja”, que ni fue revolución ni mantuvo el color naranja de sus líderes.
Ahora, en Rusia, Vladimyr Putin, un nuevo “zar” emboscado bajo las formas de aparente democracia, ha movido sus hilos para sofocar la creciente ola de descontento ante la falta de libertad y el dominio de la oligarquía adicta, que iba a evidenciarse en una pérdida importante de votos en las elecciones legislativas.
El marioneta Medvedev |
La verdad es que en Rusia se está manteniendo un soterrado enfriamiento de las libertades públicas, al socaire de un aparente liberalismo que no es sino la falaz ocultación de un férreo control de estructuras y grupos políticos, sofocando la disidencia y la oposición con métodos a lo KGB, en los que tan experimentado es Putin.
Pidiendo libertad |
Además, los problemas de Osetia y Chechenia contribuyen a justificar el uso de la fuerza, casi siempre desmedida.
La realidad es que fallan las estructuras democráticas y los mecanismos de control, porque realmente en la Federación mandan el “zar” y sus amigos, enriquecidos a base de “pelotazos” en las privatizaciones y exclusivas en las explotaciones gasísticas y petrolíferas, mientras quien no se integra en la élite del poder queda relegado al ostracismo y si protesta, especialmente si es rico, a la prisión por aparentes fraudes fiscales y económicos.
No puedo opinar más sobre Rusia, porque ni siquiera los amigos y parientes de esa nación con quienes mantengo contactos saben mucho más, o al menos no se atreven a contarlo, pero viendo cómo Yanukóvich, el ucraniano, sigue puntualmente los dictados de Putin, nada de lo que ocurre en Rusia me extraña.
El pueblo no les quiere... |
Rusia y Ucrania, sus pueblos, lo tienen difícil, mientras no pase la actual generación de absolutistas disfrazados de demócratas redentores.
Después de tantos años de dictadura soviética, ahora en Rusia se ha impuesto la dictadura económica, que aún es peor, porque se ha apropiado de la libertad mediante el control de la riqueza y de los medios de bienestar.
Así que el día menos pensado, más potentados rusos a la cárcel y más represiones por parte del poder. ¡Ojalá me equivoque!
“Cuando un gobierno dura mucho tiempo se descompone poco a poco y sin notarlo” .-Montesquieu (1689-1755) Escritor y político francés.
SALVADOR DE PEDRO BUENDÍA
NOTA.- En relación con el tema de esta entrada puede leerse el reportaje publicado en "Teinteresa", con el enlace http://www.teinteresa.es/mundo/Rusia-democracia-autoritarismo-oculto_0_607740743.html, en el que se recogen opiniones del autor de este blog, y también es de interés el enlace http://www.teinteresa.es/mundo/diplomacia-espanola-sospecha-electoral-Rusia_0_607741352.html sobre opiniones de diplomáticos y otros detalles de interés
No hay comentarios:
Publicar un comentario