16 septiembre 2013

17 de Agostiembre: Una efemérides muy especial para unos “veteranos jóvenes”: El 94 Aniversario de su "Capitán General", Don José Manuel Sánchez Gey.

LOS SUPERVIVIENTES CON
 EL "CAPITÁN GENERAL"
Le conocimos cuando era un ya maduro militar, ejerciendo como capitán de Infantería en el campamento de Milicias Universitarias (IPS) en Montejaque-Ronda, y nosotros no eramos sino unos muchachos, algunos casi imberbes, en el tramo final de sus carreras universitarias, y en puertas de iniciarse en la vida profesional.
Y de sus muchas enseñanzas, unas transmitidas con aire festivo, otras con la solemnidad o gravedad que requerían, se nos quedó grabado un vocablo, que ni existía ni existe en el diccionario, y que dudo vaya a ser admitido: Agostiembre.
Dicho así, y dicho allí, en medio de los tres meses de campamento de instrucción militar para suboficiales, primero, y oficiales, en el segundo año, de la escala de complemento del Ejército Español, el vocablo sonaba extraño, pero fue muy pronto adoptado por la mayoría de los compañeros que integrábamos las compañías 4ª (el primer año) y 1ª (el segundo verano) de la 1ª Agrupación, de Infantería, del campamento de Montejaque.
Agostiembre, en boca de quien era nuestro capitán, nunca fue definido con exactitud, pero fue asimilado por todos los subordinados/estudiantes: aquel mes –agosto— que preludiaba el fin de la estancia y estudios campamentales, y anunciaba la proximidad de un septiembre, ya no con uniforme y en los domicilios de cada cual.
En definitiva, Agostiembre suponía el futuro feliz e ilusionante, que era el portal de tiempos y vivencias más satisfactorias.
Han pasado más de cincuenta años (precisamente en junio celebramos el 50 Aniversario de nuestra promoción, la XXI, en el propio campamento de Montejaque, acogidos por el IV tercio Alejandro Farnesio de la Legión) y los compañeros que hemos permanecido todavía bajo las estrellas de nuestros colegas que ya alcanzaron la eternidad, seguimos diciéndonos de vez en cuando que ya nos veremos en Agostiembre.
Pues bien, pasó el Agosto del presente año y nos hallamos en la mitad de un Septiembre que se va resistiendo a alcanzar el otoño, y ahí surge la efemérides a celebrar, que no es otra que el 94 ANIVERSARIO DEL NACIMIENTO DE NUESTRO CAPITÁN.
Cierto es que actualmente para y por nosotros, y así lo proclamamos al mundo, ha alcanzado el más alto grado en la Milicia, el de "Capitán General" (con permiso del Rey que seguro lo ha concedido ya, pues en eso estamos insistiendo), pero lo importante es que a sus noventa y cuatro años, en ese su “Agostiembre” preludio de la ilusión, la esperanza, la real existencia, nuestro "Capitán General" nos sigue acompañando desde su Cádiz natal, y quién más quién menos de nosotros sigue experimentando un íntimo escalofrío cuando por vía telefónica escucha su voz tan paternal y tan serena, alegrándose de permanecer “en el primer tiempo del saludo”, y siente una enorme emoción cuando tiene la dicha de abrazarle personalmente del modo más efusivo en que puede mostrarse aprecio y respeto a un líder, a un profesor y a un  padre, lo que en definitiva es José Manuel Sánchez Gey para cada uno de nosotros.
!A tus ódenes,
 nuestro "Capitán General"!
Hemos enviado Cartas Abiertas a diversos medios de comunicación, hemos publicado salutaciones en nuestro Grupo en Facebook, pero especialmente, en medio de “los afanes de cada día”, proclamamos al mundo desde las redes virtuales nuestra honra por el privilegio de acompañar un año más a nuestro "Capitán General".
Te felicitamos y nos felicitamos por tenerte entre nosotros, querido José Manuel, porque de ti puede decirse que eres como Natanael, aquel personaje evangélico del que el propio Jesús dijo “he aquí un verdadero israelita, en quien no hay doblez ni mentira”.
Y en lo militar, repetimos una vez más la inmortal frase de Eduardo Marquina en su obra “En Flandes se ha puesto el sol”: !!!Capitán de los Tercios de Flandes!!! ¡!!Capitán de nuestra compañía de Milicias Universitarias en 1963/1964!!! ¡SEÑOR CAPITÁN!!!
Por encargo de Ángel Pérez Bonmatí y de sus compañeros,
SALVADOR DE PEDRO BUENDÍA

1 comentario:

  1. Nunca pudo glosarse mejor la entrañable figura de este hombre, que es parte inseparable de nuestra vida y de nuestra bhistoria personal. Animo al cronista para bque siga glosando.

    ResponderEliminar